Cuando te pregunté qué pensabas de mí me dijiste
"que estás loca"
y te reíste
no fue feo, no te reíste de mí
te hacía gracia haberte fijado en alguien así
te hacía gracia querer apostarlo todo conmigo
y oh, no sé si realmente pasó eso por tu cabeza
(no siempre sé qué pasa por tu cabeza, es curioso)
pero sé que me liberaste, de alguna forma
me llamaste loca y de repente ya podía tener una mirada triste cuando mejor lo estábamos pasando
podía llorar de la nada
podía necesitarte como el aire
o no querer verte por estar encerrada en mí
podía pedirte que no apagases la luz de la mesilla en toda la noche
y tu no me ibas a cuestionar
no te iba a extrañar
sabías que tenía motivos para estar loca
pero había algo mejor
también tenía motivos para empezar a no estarlo
liberarme no era suficiente
también me enseñaste qué seguía a la libertad
"encontraremos una solución antes de que sea tarde"
y es que de nada sirve que te quiten los grilletes si no sabes hacia dónde caminar
no me salvaste
no me vas a curar
las cosas que yo tengo conmigo misma no están en tus manos
pero me abriste los ojos
que los párpados ya me dolían de apretar
con tal de no ver lo que tenía delante ni lo que cargaba
que la libertad no es hacer solo lo que quiero
también lo que necesito
lo que me viene bien
podrías haber dicho algo más bonito
más amable
pero no algo que diese tanta fuerza
y ahora no solo sé que aún estando loca
sigo siendo igual de increíble que los demás
si no que también sé cómo dejar de estarlo, para ser todo lo increíble que puedo ser
para volver a ser yo